Aprendiz de Sancho
Panza
A buen entendedor pocas palabras
bastan. Así cuando el gallo canta, la gente se levanta. Pero puede suceder que
gallo que no canta algo tenga en la garganta. Como el reloj que deja de
funcionar al comenzar la semana. Aun así
a quien madruga Dios le ayuda, es un decir, pero no por mucho madrugar amanece
más temprano, aunque el que no madruga con el sol no goza del día. Deja la cama
al ser de día y vivirás con alegría, sin embargo cuídala bien, porque dicen que
flor de un día es. Ver el vaso medio lleno es causa de alborozo o sino que se lo pregunten al que tiene sed. Sin siesta
tampoco hay felicidad. El mundo progresa con la gente valiente y atrevida y
cada cual es rey en su casa. Recordad con nostalgia que cuando de casa estamos
lejanos, más la recordamos. Saudade, morriña
y añoranza nos visten de lágrimas de melancolía. Hogar, dulce hogar como hogaza
de pan con miel. Colmena secreta que ilumina la luna llena. Donde se cierra una
puerta otra se abre, a pesar de que casa de dos puertas mala es de guardar por
lo que un buen cerrojo la ha de cerrar. Pero amistades que son ciertas,
mantienen las puertas abiertas. Limpia, recoge y ordena para tener el alma
plena- variante de “Come, reza y ama” o “planta, siembra y cría” o la
versión moderna de “redecora tu vida”.
El huerto lleno de frutos para las celebraciones que llenan los corazones y en
casa llena presto se guisa la cena. Pasito a pasito se hace el caminito, y todos
los caminos llevan a Roma. Al salir de casa por si las moscas no olvides las
llaves ni el paraguas porque golondrina en bajo vuelo, anuncia lluvia en el
cielo. Tarde de lluvia se ablandan las discusiones y buen momento es para las
declaraciones. “A quien dices tu secreto,
das tu libertad” y pájaro enjaulado no puede cantar. Los que jaulas de oro
desean una venda en los ojos llevan. Cupido es otro que lleva antifaz pero por
el aire se le ve llegar, a pesar de que ojos que no ven corazón que no siente y
el tiempo todo lo cura. Los ojos siguen siendo el espejo del alma, mal que le
pese a la bruja del cuento de Blancanieves. “Love
is in the air” es el antídoto contra la fruta envenenada o tener claro que
a palabras necias, oídos sordos. Si miras sólo hacia atrás el rumbo perderás.
Como el barco en la tormenta rompe las olas sin temor, así tu brújula está en
tu interior. Hablar por hablar no es tiempo perdido si son palabras de
sinceridad.
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